martes, 2 de abril de 2024

El arte de hacer un CV para comunicadores

Cuando Karina Víquez, nuestra invitada a la clase de Práctica Profesional, nos sintetizó que un cv  (currículo vitae) es la forma de “contar mi historia sin que suene a un desastre”, entendí cómo evolucionamos cuando trabajamos en “Comunicación” pero también en otras profesiones…

Viquez, con una formación de base en administración de la Universidad de Costa Rica,  es una inquieta  profesional que también ha evolucionado y que ahora a la espera de dar otro salto muy pronto, por el momento se ve a sí misma y se proyecta a los demás, como facilitadora en regeneración, consultora de estrategias, impulsora de la sostenibilidad, gerenta de proyectos y capacitadora en turismo sostenible.

La experiencia de Víquez también es un ejemplo para la nueva generación de periodistas y comunicadores  quienes deben entender que la cambiante realidad impacta nuestra profesión. ¡Y  semejante narrativa  debe ser contada con inteligencia en esas cartas de presentación que a fin de cuentas son nuestros CVs!

Uno ha sido reportero, profe, relacionista público, productor audiovisual por no incluir  los meses como bartender y “sandwich maker”.  Desde fotógrafo en las bodas de las primas hasta redactor de discursos para candidatos presidenciales…

Si uno pertenece a una generación atrás, la actual será aún más  “móvil” ¡Y nadie debe asustarse ni estresarse!  

En palabras de Karina Víquez: ¿Cómo contar ese “desastre” en un CV? Primero que todo con buen humor, diría yo.
Pero la profesional  en el campo, Karina Víquez, nos dio generosamente tips para hacerlo mejor.

Primero una reflexión para “conocernos”. También hay que responder tres preguntas clave: ¿Qué he logrado? ¿Qué indicadores evidencian esos logros? ¿Cuáles fueron las acciones y el impacto en determinada población?  Esas respuestas nos marcan una narrativa con ejemplos atractivos.

Segundo, eso sí,  cuidar detalles de forma: una página, nada de foto, una tipografía sobria, sin muchos colorines. A olvidarse de si uno es eternamente soltero, casado o divorciado. Ya no se estila escribir el domicilio ni la edad… 

Además de mi correo y mi celular, lo importante es enganchar con 4 líneas sobre mi trayectoria y luego, hacer el desglose de experiencia profesional, liderazgo, educación, formación continua y por favor, no olvidarse de esas habilidades e intereses que trascienden nuestra profesión y forman parte de nuestro lindo desastre.