martes, 6 de octubre de 2020

La RECETA DE RONNY ROJAS RRR para innovar y emprender en periodismo

 

La Receta de Ronny Rojas RRR, periodista tico con carrera en Univision y ahora en Telemundo en Miami, así como años atrás en Al Día y  La Nación (Costa Rica), incluye la “innovación y emprendimiento”.

Esa es la alquimia que está saliendo de las mejores aulas como las de la  Universidad de Stanford, donde él acaba de concluir estudios, gracias a una beca.


Ronny  se ha especializado en los datos para hacer historias.  Fue ganador de un premio Emy en Estados Unidos así como del Ortega y Gasset que da El País de España,  junto a otros colegas, mientras trabajó para Univision.

Invitamos a Ronny a nuestra clase de “Práctica Profesional en Periodismo” de la Escuela de Comunicación de la Universidad de Costa Rica para aprender de su experiencia.

Comparte la RRR  y toma como ejemplo el proceso de producción que culminó en el trabajo audiovisual que le dio el premio Emy. Lo desmenuza, como se desmenuza un pollo antes de hacer la sopa.

Primero, se dio cuenta que el “área metropolitana” (unidad administrativa en Estados Unidos) con mayor cantidad de inmigrantes era Gainesville, Georgia. Ahí seis de cada diez personas son inmigrantes.

Segundo, supo que Trump había ganado abrumadoramente y que los demócratas no ganaban desde hace 40 años.

Tercero, descubrió que ese lugar se conoce como “la capital del pollo” porque de ahí sale la mayoría de pollo que se come en Estados Unidos, gracias al trabajo de inmigrantes.

Cuarto, en el Condado Hall, donde está Gainesville, los policías locales hacen las funciones de los agentes de inmigración por lo que pueden detener a una persona inmigrante por no tener licencia.

El caldo para esta historia tenía los ingredientes necesarios. Era el momento de ofrecerla en la mesa de asignaciones  de Univision. Ahí se le vio el potencial para hacer el “mini doc” que resultó premiado.

Financiar sin estar en un medio

Nos hablan (y hablamos a nuestros estudiantes) de hacer historias diferentes, de usar los datos como herramienta de reporteo, de publicar en plataformas digitales reconocidas, de hacer trabajos multimedia.  Sin embargo, ¿Cómo incursionar  en el periodismo con esa receta y ganar plata para vivir, pagar impuestos y sostener  las finanzas personales?

Antes de responder, Ronny recuerda lo básico: echarse un buen cuento. Hay que proponer una historia no contada, sólida y con proyección que interese más allá de las fronteras nacionales. Esto sale de un ejercicio de “pre-reporteo” responsable que permite ver los puntos débiles de antemano.

Eso sí, luego viene la pregunta: ¿A quién proponerla? Ronny hace un “goteo de nombres” de organizaciones y personas de Latinoamérica, Estados Unidos y Europa interesados en financiar historias.

Recomienda también participar en cuanto encuentro o conferencia periodística haya para conocer colegas, saber de sus iniciativas y palmar directamente hacia donde apunta la creatividad periodística. Hay becas para participar en estas actividades pero también es posible que tres periodistas se junten y paguen un Airbnb, sugiere Rojas para evitar las excusas: “¡Es caro!”.

La RRR también apunta a “embarcarse en proyectos colaborativos” no solo con pares periodistas sino también con profesionales que vienen del diseño gráfico, del mundo audiovisual, de la estadística y de la ingeniería de sistemas. ¡Son fundamentales para que “me limpien los datos”!, explica Rojas quien a la vez recuerda los aportes de Rigoberto Carvajal desde tiempos de La Nación.

Rojas dice que como rutina diaria hay que leer lo que la gente de afuera está haciendo. Opina que en Costa Rica, pocos medios digitales realizan esa tarea innovadora. Destaca eso sí,  La Voz deGuanacaste que cuenta con el apoyo económico de un estadounidense que se enamoró de las playas de Nosara y vio la necesidad de un medio digital del que ya hablan fuera de las fronteras ticas.

Ronny Rojas, nacido en la zona de Los Santos, reconoce también que hacer periodismo en el exterior  se logra con al apoyo de otra gente. Por eso, desde el inicio de su conversación, menciona a  la hoy directora de una maestría de datos en la Universidad de Columbia en Nueva York, Gianina Segnini quien fuera su editora durante su paso por el periódico La Nación. Rojas también ha incursionado como profe de “perio” en  Craig Newmark Graduate School of Journalism en la Universidad de la Ciudad de New York.

 

domingo, 4 de octubre de 2020

El sudor comunica ( y lo dice el Papa)

Me gusta eso que el Papa Francisco vea en la transpiración, una pieza de la comunicación humana. El sudor sin duda forma parte de la condición misma de las personas y como el mismo Papa escribe, “eso habla”.

Uno suda en muchos momentos cotidianos de la vida y en lugar de perfumar siempre esa humanidad, al igual que el Papa, hay que exaltarla cuando de definir la comunicación se trata. Y no solo eso, sino también ver la transpiración como un referente al conversar cara a cara,  actividad por cierto, venida a menos en tiempos de pandemia.  

No es gratuito que mucho se ha investigado sobre la manifestación del sudor como significado de pasiones eróticas, situaciones de estrés y liberación de felicidad. Este Papa escudriña para llegarle a los detalles que permiten conectar con la vida de las personas y a la vez, con definiciones de asuntos estratégicos de esta coyuntura como la comunicación real versus la virtual.

Por geografía, sudamos en América Latina al igual que sudan los nórdicos europeos; por religión, los islámicos y hasta los judíos ortodoxos; y por los simplismos ideológicos: los pobres y los ricos.


La misma persona que la Revista Time le dedicó una portada con la frase: “el Papa de la gente”, piensa que: “Hacen falta gestos físicos, expresiones del rostro, silencios, lenguaje corporal, y hasta el perfume, el temblor de las manos, el rubor, la transpiración, porque todo eso habla y forma parte de la comunicación humana”.

En la encíclica: “Todos hermanos”, el Papa contrasta la comunicación entre las personas con las relaciones digitales que  si bien tienen apariencia de socialibilidad, éstas últimas no alcanzan para unir a la humanidad.

Qué en una encíclica se aborden las partes valiosas de la comunicación interpersonal aporta significado en sí mismo para quienes compartimos esos contenidos con estudiantes que a veces solo han vistos en los “clicks” y en los “likes” una manera de reaccionar ante otras personas. Y ahora Francisco nos pone a sudar más de la cuenta, al momento de dar clases de Comunicación y explicar esa diferencia.